30 Oct LOS ESPACIOS DEL ESPECTÁCULO / DIRECCIÓN ARTÍSTICA
La escenografía ha estado siempre muy ligada a la pintura y la arquitectura. En un principio, el teatro se centró en una escenografía limitada a las tres escenas de Vitruvio: trágica, cómica y satírica; donde las decoraciones estaban muy marcadas en función de esta escena. Se conseguía así una representación pictórica y suponía un espejo social.
Pero el espectáculo ha evolucionado, al igual que lo ha hecho la sociedad. De esta forma, los espacios cotidianos, los que rodean al ser humano se han convertido en los espacios del espectáculo. Y así, aparecen nuevos usos que no están relacionados con los que se habían planteado en un primer momento. Ya no son necesarios recintos predeterminados para una representación, sino que la escenografía se puede construir en todos los entornos reales. Pero para proyectar escenografía hay que conocer muy bien el espacio, saber cuál es el espacio que va a tener el espectáculo y cuál va a ser el del espectador.
NOSOTRAS
Y en este campo nos hemos metido esta semana con Aurora Herrera para hacer la inauguración a una exposición temporal en el Museo del Traje. Cada alumna ha elegido la temática, y el lugar dentro del museo y se ha puesto manos a la obra.
Para poder proyectar en un espacio como el Museo del Traje tenemos que conocer muy bien los espacios del espectáculo, cómo se proyectan, qué instrumentos necesitamos y cómo lo vamos a construir. Y es que, el espacio del espectador en este lugar es muy amplio: el espectáculo invade el espacio real y se identifica con su entorno habitual.
¿Y cómo se lleva a cabo esta intervención de forma que se aúnen espacio escenográfico y espacio arquitectónico? Pues lo hemos hecho a través del movimiento, de recorrer el Museo del Traje. Haciendo hincapié en el formar parte, en la vivencia del espacio. Y es que de esta forma cambian las perspectivas dentro del espectáculo, los puntos de vista y la posición. Pero se consigue una escenografía, que, al igual que la arquitectura, es leída cuando se atraviesa.
Así no estamos ofreciendo una imagen plana, sino que entran en juego la aproximación, la aleatoriedad, el ir de lo general a lo particular. Entras y lo vives. Y, además, lo vives no solo, sino con el resto de espectadores y con los actores, bailarines y personajes. Porque no solo tiene importancia el espacio alrededor de los intérpretes. El espacio y el actor van a estar al mismo nivel.
Con todo ello, espacio, intérpretes, espectadores, instrumentos –luz, sonido, reflejo, transparencia, textura- van a asegurar la calidad del hecho escénico, cambiante y ágil, donde cada componente hace y siente el espectáculo.
¡ESO ES TODO AMIGOS!
Con esto, en Máster Efímeras hemos terminado el bloque de escenografía. Hemos explorado (y mejorado) nuestra capacidad artística en muchos y diversos aspectos. Hemos pensado, diseñado, actuado, ejecutado, interactuado. Lo hemos hecho juntas y ha sido la mejor manera de aprender, vivir y sentir todas las partes del espectáculo
Nuestra creatividad está ya más que preparada para empezar el siguiente bloque de Arquitecturas Interactiva. ¡No os lo perdáis que esto promete!